sábado, 29 de mayo de 2010

Réquiem

Qué bello, qué bello descaro el dejar de pensar
en la eterna comprensión de la locura.
Qué placer abrir las ventanas al mundo
y reír a carcajadas,
hacer partícipe al sordo público del nacer del egoísmo
que es la medida absoluta de la creatividad.

La soberbia soledad creadora.
El poder de entregar al instante
el ardiente orbe de tinieblas, el mar oscuro.
La noche, la noche del alma, Poesía.
De entregarte mi vida desnuda,
dejarte comprender, y comprenderme.
Que me desarmes sobre el lienzo
y vuelvas a levantarme en estos versos desgastados.

jueves, 27 de mayo de 2010

Silencio

Callaos, callaos todos de una vez.
No quiero escuchar más vuestras absurdas conversaciones
ni el taconeo incesante. No quiero vuestros gritos.
Vuestras quejas, vuestros maquillajes.
No quiero rotos en el momento, ni éstas imperfecciones,
no quiero un vosotros mal configurado.

Callaos y dejadme en el silencio. Dejadme escuchar al silencio
y marchaos de una vez, dejar el timbre tras vosotros.
Id con vuestras mentiras, id con la hipocresía
y dejar de golpearme el pecho con vuestro ruido.

Dejadme entender por una vez los susurros
que el silencio quiere compartir conmigo en esta tarde.
Dejadme traducir las caricias del aire. Ser libre.
Por unos segundos, callaos y dejad
que me duerma en los brazos del presente.

miércoles, 5 de mayo de 2010

Y qué descuido más dulce
es el encontrarme recordándote.
Qué dulce, y qué extraño
es intentar buscar en ti
ese exotismo que intenta envolverme.
Que necesito como protección.

El poeta es el recién nacido
en este mundo extraño e incomprensible.
Y necesita del misterio,
de las manos que le sujeten
para recordar...
que no todo es frío,
ni soledad.

A pesar de esta incertidumbre
que no deja de crecer.

Y, qué dulce descuido,
que me encuentre curioseando en tu mirada
como si fuera el único suelo firme,
como si tu serenidad pudiera,
de verdad, arrancarme
los miedos del pecho.

Y el miedo que provoca
el no quereme sola
después de tus ojos,
el miedo a que tu música
me devuelva pedazos de humanidad.