
Miro hacia atrás, desnuda,
y los sabores se derriten en mi paladar desgastado,
y observo el pasado como una pelicula
en blanco y negro.
Miro hacía atrás esta noche,
y los recuerdos se prostituyen y se disfrazan,
y solo dejan el olor de la experiencia,
fotografías plastificadas.
Miro al horizonte de las vivencias,
y creo sentir pieles sin nombre,
y emociones concentradas en un vaso
de ese fragil cristal.
Intento detener esta fugacidad
que voraz devora todos los colores.
Solo queda el cariño intentando
camuflar sentimientos que solo son
polvo en mis bolsillos.
Miro hacía atrás y sonrio...
malditas estas manecillas,
que me hacen recordar con gracia
lo que ayer me robaba la vida.
y los sabores se derriten en mi paladar desgastado,
y observo el pasado como una pelicula
en blanco y negro.
Miro hacía atrás esta noche,
y los recuerdos se prostituyen y se disfrazan,
y solo dejan el olor de la experiencia,
fotografías plastificadas.
Miro al horizonte de las vivencias,
y creo sentir pieles sin nombre,
y emociones concentradas en un vaso
de ese fragil cristal.
Intento detener esta fugacidad
que voraz devora todos los colores.
Solo queda el cariño intentando
camuflar sentimientos que solo son
polvo en mis bolsillos.
Miro hacía atrás y sonrio...
malditas estas manecillas,
que me hacen recordar con gracia
lo que ayer me robaba la vida.
3 comentarios:
Tiempo que no perdona, que todo se lleva (a veces afortunadamente), y que en ocasiones nos deja descubrir algo nuevo. Felicidades por tu escrito. Saludos.
No se puede viajar sin mirar los espejos retrovisores.
Un besopoema!
eres todo y eres todos
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