miércoles, 11 de marzo de 2009








A veces la tristeza es tan grande que no puede expresarse con palabras.

O tan profunda, que aunque se ponga por escrito, el poema no puede ser comprendido.

Por eso, es mejor que hoy no escriba más, y que el silencio diga todo lo que yo no puedo.

3 comentarios:

ChuLytta dijo...

Cuando estés hasta el cuello, aprendí, que siempre puedes sacar fuerzas para asomar un poco más la cabeza.

La peor estrategia es la rendición.
(Y apra que te lo diga yo...)

Salva dijo...

Ya sabes lo que digo habitualmente: en la música, un silencio vale tanto como una nota.

Salva dijo...

(Y también genial lo de tu fotolog)